El employer branding es una de esas palabras que se ha puesto de moda en muy poco tiempo. No sólo los directores de recusrsos humanos hablan de ello constantemente sino que proliferan las especializaciones formativas que tiene que ver con ello: cursos, postgrados, masters, etc.
Y la pregunta es: ¿Qué es el employer branding y para qué sirve?
Es sencillamente la fidelización del talento. La marca de empresa como lugar de trabajo o employer branding es el proceso de promover una empresa u organización, como el lugar de trabajo para un determinado grupo objetivo deseado, ese que la empresa necesita y quiere contratar y retener. Es el proceso que facilita la capacidad de la compañía para atraer, reclutar y retener a su Top Talent - empleados ideales - y el que ayudar a conseguir los objetivos del plan de negocio de la empresa.
Siempre entendemos la reputación o imagen de marca ligada a los productos de una empresa: la imagen de marca es el producto. Pero la imagen de marca o la reputación de una empresa también puede ser la de la compañía como lugar de trabajo. Y ¿por qué es tan importante? Básicamente porque si tu empresa está en el mercado y quiere encontrar talento, el employer branding te dará una ventaja cualitativa no sólo a la hora de encontrar el candidato adecuado sino también, a retenerlo.
La era digital ha significado una disrupción en la dinámica básica de contratación: antes eran los profesionales los que buscaban a las empresas y ahora son las empresas las que buscan a los profesionales. Las empresas deben adaptarse a un nuevo profesional muy cotizado: el nativo digital. Esta nueva generación de profesionales huye del status quo organizacional, propio de las empresas tradicionales como reuniones interminables, procesos jerárquicos, burocracia sin sentido y órdenes. En cambio demandan flexibilidad, conectividad, conversación y teamworking. Estamos hablando por tanto de una preferencia de estructuras horizontales y entornos no jerárquicos, frente a estructuras verticales y encorsetadas.
En cualquier caso la empresa sólo podrá atraer y retener el talento si tiene una identidad real, creíble, relevante, distinta y con aspiraciones. Para crear o promover la marca de empresa como lugar de trabajo existen dos tipos de estrategias en función del tipo de público objetivo.
- Estrategia de retención del talento. Las acciones están orientadas a los empleados actuales de las empresas. Algunos ejemplos: plan de carrera, incentivos, reconocimiento de méritos, ambiente favorable, etc.
- Estrategia de atracción de talento: Las acciones están orientadas a empleados futuros. Algunos ejemplos: sueldos competitivos, horarios flexibles, plan de formación, magníficas instalaciones, herramientas de trabajo de última tecnología, etc.
Las compañías deben adaptarse a este nuevo profesional sino quieren perder fuerza en el futuro. Las empresas son las personas que las conforman. Cuanto más competitivos sean nuestros empleados más lo será nuestra empresa.
